1.    El psicólogo es para locos

Menciono este estereotipo como el primero, porque según mi opinion y mis experiencias, es el que se encuentra más difundido entre la gente. Seguramente, cada uno de nosotros conocemos a alguien que fuma un cigarillo cuando está estresado porque no sabe relajarse diferente y probablemente de otra manera no domina esta situación, ya que esta es su reacción aprendida. Para ninguno de nosotros esta reacción parece distinta, rara, no pensamos que esta persona posee una debilidad porque no sabe manejar su estrés. Pero cuando una persona visita al psicólogo porque no sabe como dominar su estrés u otro problema, se cataloga socialmente como loco. Cuando en cambio esto significa que esa persona está consciente de que no maneja su estrés y quiere mejorar sus habilidades, quiere hacer algo con su problema. Pero viéndolo de otra manera, cuando una persona enciende un cigarillo sólo porque está estresado, nunca aprenda a manejar las situaciónes complicadas. Lo único que aprende es a ser dependiente. La psicoterapia no es para eliminar los recursos del estrés, no tiene alcance para esto, pero nos enseña cómo manejar el estrés y las emociones en cada situación. Obtenemos las habilidades que podemos aprovechar en cualquier momento en el futuro, nos capacita para liberarnos.

2.   Mi mejor amigo es mi mejor psicólogo

Muchas veces he escuchado la opinión “yo no necesito un psicólogo, tengo un gran amigo, él es el mejor psicólogo.” Sí, gracias por todos nuestros estupendos amigos, son irremplazables. Y de esta manera funciona; la amistad y el buen apoyo social nos ayudan muchas veces en las situaciónes complicadas, en el estrés o durante la depresión. Sin embargo, en muchos casos no es suficiente hablar y escuchar a nuestros amigos. Aunque sus intenciones sean buenas, y sus consejos logren un alivio en nosotros por un momento, a largo plazo pueden no llegan a ser tan útiles para nosotros.

3.   El psicólogo es una viejita acartonada o un hombre fúnebre con barba

Intenten ahora imaginarse a un psicólogo, ¿cómo se ve? Para muchos la respuesta será un adulto mayor, frío, serio e incluso intimidante. Un estereotipo que no puede estar más alejado de la realidad.  En la actualidad, un psicólogo puede tener entre 23 (que es más o menos la edad cuando termina la universidad) y tranquilmente también 99 años, si su salud mental y física le permiten seguir en la profesión de psicólogo. Así como tenemos varios tipos de personas, también tenemos varios tipos de psicólogos. Algunos se ríen junto con sus clientes durante la terapia, otros permanecen serios y habrá seguramente aquellos quienes no guiñan un ojo todo el tiempo para no perder ni un poco de su autoridad. Todo depende del rumbo terapéutico que el cliente escoja.

4.   El psicólogo es un mago o un curandero milagroso

¿Por qué nos llamo magos o brujas? Muchas personas llegan a la primera sesión sin tener idea de cómo funciona la consejería o la terapia psicológica. Algunos llegan con la expectativa de que el psicólogo ya en la primera sesión les diga cuales son todos sus problemas, les den consejos precisos sobre cómo resolver sus problemas y sin ningún esfuerzo mejoren la calidad de sus vidas. ¿Y cómo termina todo?  El cliente se va de la sesión desilusionado y descontento por no obtener lo que esperaba. Muchas veces también encuentro la opinión de que los psicólogos somos como los criminalistas de las series de televisión, los cuales  saben todo sobre sus clientes a base de su comportamiento en casos muy aislados. El psicodiagnóstico, especialmente psicodiagnóstico diferencial es un proceso mucho más complejo, en el cual nos puede dar una guía; por ejemplo, a qué deberíamos poner más atención, pero de fijo el perfil complejo de la personalidad humana o el perfil de sus problemas no se funda en esto.

Eso sería algo de mis experiencias como psicóloga y los mitos, con los cuales tengo que enfrentarme en mi profesión (esperando que con el tiempo disminuyan más y más). Seguro no somos los únicos que tienen que esclarecer algunos de los estereotipos de su profesion. ¿Qué piensan ustedes sobre los psicólogos y su trabajo?